Él es grande…

“Grande en consejo, y magnifico en hechos; porque tus ojos están abiertos sobre todos los caminos de los hombres, para dar a cada uno según sus caminos, y según el fruto de sus obras.” Referencia bíblica: Jeremías capitulo 32, versículo 19.
Una vez que llega a conocer a Dios personalmente, usted tiene el más grande consejero que pueda conseguir en todo el universo. Para recibir consejo, debe ser capaz de escuchar y entender lo que se le dice.
¿Conoce usted al Señor Jesucristo de tal manera que pueda conversar con Él libremente en cualquier momento y lugar?. Si es así, entonces tiene usted al más grande consejero de Quién pueda recibir ayuda personal, ya sea espiritual o emocional; y este Consejero no tiene solamente los más perfectos consejos para usted, sino que también tiene poder para obrar en su vida. Él es poderoso en hecho y palabra, de modo que, como afirma la Escritura (la biblia), “…el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.” (Referencia bíblica: Filipenses capitulo 1, versículo 6)
¿Conoce usted a esta clase de Dios…?
Dios ve todo lo que todos hacen en cualquier lugar y en cualquier momento. Piénselo, Él le dará ahora o en el futuro la exacta recompensa por cada una de sus acciones. Si la acción es negativa resultará en disciplina. Pero si lo que hace está basado en la obediencia a Sus mandatos, la recompensa resultará en bendiciones para su vida.
La sabiduría hará que busquemos su consejo y lo sigamos, esta es la manera hacia el crecimiento espiritual.
Esfuércese en obedecer a sus mandamientos y verá cuán grande es su Dios.

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece

La biblia enseña que la persona que cree que puede manejar todas las situaciones hábilmente, porque piensa en forma positiva, se va derecho al infierno. Pues bien, ¿qué quiere decir la biblia “Todo lo puedo en Cristo”?
La biblia se refiere a la profundidad, la sensibilidad, la compasión, la madurez, el gozo de Jesucristo que vive en cada creyente.
Dios no puede usar al hombre con características de indiferencia; quien no puede llorar y compadecerse con los que sufren.
Tampoco puede usar a la mujer que no sabe sonreír y compartir su sonrisa con los demás. (Amargada)
Dios no puede servirse de aquella persona que dice: “yo puedo manejarlo todo con mis propias fuerzas (no necesito de Dios), puesto que soy autosuficiente”.
Usted lo puede todo en Cristo porque le ha sido dado el poder para hacer todas las cosas y para actuar bajo cualquier circunstancia como un hombre o una mujer que le pertenece al Señor; porque Él está en usted, esta es la razón por la cual los cristianos son las únicas y autenticas personas llenas de poder, es por eso que los cristianos pueden “mover montañas”, cambiar un hogar, un colegio, un estado una nación y hasta el mundo entero.
Ellos no necesitan hacerlo lamentándose ni esforzándose en sus propias habilidades (no es por sus fuerzas), sino gozosos y más cuidadosos que nadie en este mundo, pues dependen de Aquél que con su poderosa mano, extiende los cielos como una cortina.

“Cuán grande y poderoso es nuestro Dios”

Recuerde usted todo lo puede en Cristo; porque de Él provienen tus fuerzas.

Referencia bíblica: Filipenses capitulo 4, versículo 13.

YA RECIBÍ A JESÚS EN MI CORAZÓN, Y AHORA... ¿QUÉ HAGO?

Ahora que usted recibió a Jesucristo en su corazón tiene la salvación, ha entrado por esa puerta estrecha (Jesús) que le conduce a nuestro Padre celestial, ahora debe comenzar a caminar por el camino angosto, el camino de obediencia a Dios, para lo cual:
  • Asista a una iglesia, las iglesias evangélicas aman a Jesús y esperan su retorno, en las cuales, le recibirán y ayudarán a aprender más de la voluntad de Dios para su vida.
  • Ore permanentemente a Dios en el nombre de Jesús, la oración le permitirá tener una relación intima, recuerde que orar es conversar con Dios y No repetir frases de memoria.
  • Lea la Biblia (sugerimos empezar con Juan 3:16) y pida a Jesucristo que le revele su palabra.
  • No se avergüence de confesar a otros que Jesús es su Señor y Salvador.
  • Pida a Jesús que le prepare para su pronta venida.
  • Ame a Dios con todo su corazón y a su prójimo como a usted mismo.


INVITE A JESUCRISTO A ENTRAR EN SU CORAZÓN

Jesús ya pagó el precio por su salvación, recíbalo en su corazón y reconozca que JESUCRISTO es el Señor de su vida y su Salvador.Invítelo hoy a entrar en su corazón, ¡Atrévase!, y repita ahora esta oración en voz alta:
Señor Jesús:
"Yo confieso que soy un pecador y te invito a entrar en mi corazón.
Perdona mis pecados.
Yo me entrego a ti.
Gracias por esta vida eterna que tú me estás dando en estos momentos.
Yo te confieso ahora Jesús como mi Señor y mi Salvador.
Lléname con tú Espíritu Santo.
Has tu voluntad en mi vida, ayúdame a buscarte y obedecerte."

TODOS NOS HEMOS APARTADO DE DIOS Y NECESITAMOS SU PERDÓN

Todos nosotros hemos realizado o dicho cosas malas, no importa si son grandes o pequeñas, o aunque sólo las hayamos pensado.
¿ Alguna vez ha dicho alguna pequeña mentira? ¿Alguna vez ha robado algo pequeño o no ha devuelto algo que a usted le prestaron? ¿Le ha faltado, en alguna ocasión, el respeto a sus padres…? ¿Ha deseado alguna cosa de otra persona… auto, la mujer (u hombre), una casa, ropa, felicidad, alegría, fama, dinero, etc.? El hecho concreto es que a cualquiera de los ejemplos anteriores se le llama pecado, por naturaleza somos mentirosos, ladrones, adúlteros, sin amor, codiciosos, etc., y nuestros pecados nos han separado de Dios.
La Biblia dice “Todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios”, nuestros pecados nos han separado de Dios para siempre.
Si usted es de los que piensa: Dios es bueno y no podría enviarme al infierno, sepa que Dios es bueno y es amor, sin embargo, Él también es justo y de la misma forma que si cometemos una infracción de tránsito (como viajar a exceso de velocidad) y comparecemos ante un Juez de policía justo y bueno, este nos deberá aplicar la sanción que define la Ley, por muy buena persona que él sea, porque su deber es aplicar la justicia.
La Biblia dice “la paga del pecado es la muerte” y esto significa pasar una eternidad en el infierno, pero como Dios nos amó tanto y es tan justo, que Él entregó a su hijo Jesucristo para que todo aquel que le reciba y obedezca obtenga el perdón de sus pecados.

¿SABÍA USTED QUE JESÚS LE AMA, Y QUE MURIÓ EN LA CRUZ POR SUS PECADOS?

Amigo(a), la Biblia dice, “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito (Jesucristo), para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna.”Jesús nació de una virgen; María, la cual antes que se casara fue visitada por un ángel que le dijo que daría a luz al Hijo de Dios, cuando ella le preguntó cómo eso podía suceder, el ángel respondió “El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra, por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.”Jesús es el Hijo de Dios, Él vivió una vida sin pecado y murió en la cruz para pagar por nuestros pecados. “Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.”El profeta Isaías dijo de Jesús: “Mas él fue herido por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados. Por darnos la paz, cayó sobre él el castigo, y por su llaga fuimos nosotros curados.” Jesús pagó el precio de nuestros pecados para que pudiéramos ser perdonados y tener vida eterna. Jesús resucitó de entre los muertos y ahora está en el cielo con Dios Padre, Jesús nos ofrece el regalo de la vida eterna, es decir, vivir por la eternidad con Él, si lo aceptamos como Señor y Salvador.Dios se nos acerca con amor y quiere que seamos sus hijos. La biblia dice: “Mas a todos los que lo recibieron (a Jesús), a quienes creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.” Usted puede pedirle a Jesús que le perdone sus pecados y que entre en su vida como su Señor y Salvador. Jesús dijo “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí”. No tenemos otro camino, para lograr el perdón de Dios por nuestros pecados y la vida eterna.No olvides:

  • En Jesucristo tenemos salvación y Él es el único camino para llegar a Dios.
  • Por su sacrificio en la cruz y su sangre derramada tenemos el perdón de nuestros pecados.
  • Por su muerte y resurrección tenemos vida eterna.
  • Por sus heridas tenemos sanidad para nuestras vidas.
    Usted necesita rendir su vida a Jesucristo y recibirle como su Salvador y Señor.